Una vecina de barrio Hipódromo denunció ante la justicia abuso policial y daño psicológico hacia ella y sus hijos

El sonado hecho ocurrió en horas de la noche del pasado 23 de enero, momentos en que la mujer se encontraba arribando en su vehículo al domicilio de sus padres a buscar a sus hijos, cuando es arribada por uniformados que realizaban una persecución en el lugar, quienes se detuvieron y le hicieron saber que circulaba mal.

De ahí en más la situación comenzó a escalar hasta que culminó con el arresto de la conductora.

“Puede ser que haya cometido una infracción de tránsito, que fuera de venir a contramano, cosa que tampoco está muy bien declarado ya que en el barrio las calles no están flechadas ni nada por el estilo”, sostuvo Ana Patrón.

“Yo freno sola, sin que la policía me haga frenar”, indicó la mujer a La Voz de Melo, asegurando que en ese momento los efectivos comenzaron a gritarle.

“Me pide que le de la libreta y que me baje del auto, yo me niego a hacerlo, porque no veía que haya cometido ninguna infracción, y empecé a gritar porque quedé en shock, llamando y gritándoles a mis padres”.

La mujer alega que quedó “nublada” hasta que se percata que sus progenitores salen de su hogar tras escuchar los gritos y que, mientras ellos se acercan, la policía le abre la puerta del auto.

“Ahí me esposan y me tiran hacia la canaleta, mi hijo grande se viene a arrimar a mi lado para decirle `a ella no´, lo agarran también del brazo y lo expulsan”.

A todo eso, sus otros dos hijos pequeños salen llorando y muy alterados desde la casa de sus abuelos al ver a su madre en el piso.

“A mis padres no les da el tiempo de guardarlos porque fue algo que nos dejó a todos en shock, sin tener respuesta, sin saber qué hacer ya que dos policías me agarran y me lastiman, que tengo las evidencias de cómo me lastimaron”.

“Ahí me llevan a hacer el reconocimiento y no me dejan revisar por el doctor en el Hospital de Melo, diciéndole que me llevan porque me sacan la libreta de conducir, cosa que yo no poseía libreta porque me la saqué después de que pasó esto”, reconoció la denunciante.

Posteriormente, y tras esperar en la Seccional 11 hasta saber que quedaba detenida, la vuelven a llevar al nosocomio local, donde finalmente la ve un doctor sobre las 3 de la mañana.

“El doctor que me atiende me hace el chequeo correspondiente y ve cómo estoy de los brazos, las piernas, inclusive me da un analgésico porque estaba muy alterada, con mucho dolor de cabeza”, narró Patrón, quien luego pasó la noche detenida.

Al otro día es acompañada por un abogado de oficio a fiscalía y nos cuenta que la fiscal que lleva el caso le dice que “si volvía a escuchar mi nombre ya sabía dónde iba a ir, que era un peligro para la sociedad”.

“No me considero un peligro para la sociedad, justamente ellos iban en un procedimiento y no siguieron al sospechoso, quien siguió de forma rápida y nadie lo siguió ni nada y la que pagó el pacto de todo fui yo y mis hijos”.

“El shock que tengo psicológico y mental, y lo que me hicieron físicamente a mí y a mis hijos no se lo deseo a nadie en este mundo y voy a luchar por que se haga justicia por lo que me pasó para que no vuelva a pasar con nadie más”, aseguró Patrón.

En ese sentido, la mujer explicó que la denuncia va contra los policías involucrados en el procedimiento: “Se los acusa de lo que me hacen, cómo me lastiman, del abuso de poder, porque fue un abuso de poder, y el daño psicológico que se le hizo a los niños”.

“Quiero que la fiscal del caso vea bien los videos, razone bien todo lo que pasó y vea que soy una madre luchadora que pasa todos los días trabajando para sus hijos y me parece que esto fue fuera de lugar, fue un abuso tremendo, brutal, y no se lo deseo a nadie”.

“Quiero que a raíz de esto se haga justicia por mí y por muchos más que pueden haber pasado lo mismo” sostuvo la mujer, quien tiene testigos y pruebas fílmicas, grabadas por teléfonos celulares  y cámaras de seguridad de un vecino, que registraron lo ocurrido y servirán de prueba en su defensa.